Agrio cruce dialéctico el que han protagonizado el secretario general del PSOE en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, y el presidente de Diputación Provincial, Francisco Salado, del Partido Popular, a cuenta de las ayudas anunciadas por el Gobierno Central, ya que una parte importante de las mismas va a parar a Canarias y Baleares.
Salado considera que “el programa de ayudas del Gobierno es un desprecio total a la Costa del Sol y a lo que es el turismo, a las 120.000 familias que viven del sector y a las miles de empresas que son verdaderos héroes tras un año de pandemia”, ha señalado.
Entiende el dirigente del PP que “es increíble” el reparto realizado de los fondos, ya que las comunidades insulares reciben 2.000 millones de los 7.000 millones anunciados para dar ayudas directas a las empresas y asegura que el Ejecutivo de Pedro Sánchez actúa esta manera a “en base a un posicionamiento político y no estratégico para ayudar a la industria turística o a la marca España”.
Por su parte, Ruiz Espejo, sin entrar a evaluar las cantidades percibidas por esos territorios, sí ha asegurado que “Salado se ha convertido ya en portavoz de su partido en la provincia de Málaga, no de la Diputación o de los organismos de turismo; ni tiene razón ni es verdad lo que dice”.
El socialista ha abundado en que Andalucía es “la Comunidad Autónoma que más va a recibir, 1.000 millones de euros, el 16 por ciento de los 7.000 millones de ayudas directas que están incluidos en este plan” y de ellos, la provincia de Málaga obtendría 231 millones de euros, “algo que ningún otro gobierno ha hecho nunca”, ha recalcado Ruiz Espejo.
