Desde la cordura de mi locura
Y de repente, lo que parecía imposible se va imponiendo poco a poco y no parece que sea una idea tan descabellada, me refiero al teletrabajo. Algunas empresas, quizás por logística, ya lo tenían implementado prepandemia pero, sin duda, nada estaba tan extendido como lo está ahora.
Muchas cosas han cambiado en los últimos meses y esta posibilidad de que puedas trabajar desde tu casa, es una de ellas. Algo que para los empresarios habría sido impensable y que cuando se han visto forzados a llevarlo a cabo, han visto que quizás no es tan mala idea.
Revisemos algunos de los puntos más positivos: para ellos, para el empresarios, sin duda es el ahorrar costes, luz, calefacción, alquileres y un largo etcétera. Para el trabajador, desde mi punto de vista y por experiencia personal es la optimización del tiempo y la conciliación.
Para mí, el tiempo que no invierto en atascos de tráfico para ir y volver de la oficina es una de las mejores cosas del teletrabajo. Ahora dedico ese tiempo a mi vida personal o a cosas de trabajo, pero no lo considero como me sucedía anteriormente “una pérdida de tiempo”.
Lo más negativo, sin duda, la falta de esa interacción cara a cara con tus compañeros y que todo tenga que ser resuelto con una llamada cuando antes te acercabas un momento a su mesa y quizás quedaba todo solucionado en cuestión de minutos. Y también el sedentarismo que puede acarrear, paseos que antes te dabas con los compañeros ahora estás todo el día en casa.
Pero, desde luego, y esto no lo digo yo, sino que ha quedado demostrado con estudios que la productividad es igual o incluso mayor trabajando desde casa que desde la oficina. Quizás esto sea porque somos adultos responsables que sabemos lo que tenemos que hacer y no necesitamos que nos estén vigilando todo el rato. También pasaba antes, pero igual no se habían dado cuenta de que era posible, quizás. Probablemente este sea un argumento de peso para aquellos negocios que están pensando en mantener esta opción en un futuro.
La pregunta ahora es si el teletrabajo ha venido para quedarse. Claramente, si es que sí, es obvio que debe ser bajo unas condiciones de bienestar para el trabajador en un ambiente adecuado tanto para su salud física y como su salud mental.
Pero, sin duda, el hecho de que exista esta flexibilidad es un factor que podría el ámbito empresarial, en general, dar opciones a los empleados y escucharles, que sean más felices en su trabajo sin duda va hacer que sean muchísimo más productivos y eficaces aunque de esto ya hablaremos en otro momento.
Evidentemente no todas las profesiones son aptas para trabajar desde casa pero, si la tuya es una de ellas, ¿Te gustaría tener la flexibilidad de elegir si trabajar desde casa o desde la oficina?