Agentes de la Policía Nacional han detenido a diez personas en relación con la muerte del disc jockey que recibió una bala en el cuello durante una fiesta en una villa de Guadalmina.
La propia Policía ha desvelado los últimos detalles que restaba por conocer en relación con el incidente. Entre los arrestados, además del presunto responsable de los disparos, un varón de 30 años y nacionalidad alemana, al que atribuyen los delitos de homicidio y tenencia ilícita de armas, figuran además otras nueve personas -entre ellas un escolta del principal investigado, dos organizadores del evento, tres integrantes del personal de seguridad y un dj compañero de la víctima-, arrestadas, en su caso, por supuestos delitos de encubrimiento y omisión del deber de socorro. Con ello se da completamente por cerrada la investigación policial, de la que conoce el Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella, que ha levantado el secreto de las actuaciones.
Los hechos tuvieron lugar la madrugada del 29 de marzo, en una villa de la urbanización Guadalmina Alta, donde se celebraba una fiesta ilegal. En el interior de la vivienda, que había sido alquilada para la ocasión, los agentes localizaron a la víctima, un hombre español de 40 años, con un impacto en el cuello. Los servicios sanitarios solo pudieron certificar su fallecimiento.
Según se recoge en el atestado, el dj fallecido habría recibido amenazas de muerte por parte del principal investigado, a quien al parecer no le agradaba la música que estaba pinchando en un momento dado, amedrentando a la víctima al objeto de que la cambiara, todo ello antes de los disparos.
Durante la noche de los hechos, el supuesto responsable de la muerte del dj extrajo un arma de fuego y efectuó dos disparos al techo del salón donde se concentraban numerosos asistentes; un proyectil alcanzó de arriba a abajo, entrando por el cuello y hasta un pulmón, a la víctima, que murió en el lugar. Tras el suceso, todos los asistentes al evento huyeron de la villa y abandonaron a la víctima sin avisar a los servicios de emergencias.
Las primeras detenciones se produjeron en menos de 48 horas de la muerte del disc jockey, localizándose y deteniéndose en Málaga capital al presunto autor de los disparos, un hombre de 30 años y nacionalidad alemana, y a su escolta, un alemán de 28 años, este último como presunto responsable de un delito de encubrimiento y omisión del deber de socorro. Las detenciones se practicaron momentos antes de que ambos intentaran huir del país.
En el momento de las detenciones, intervinieron el vehículo utilizado por el responsable material de la muerte, que abandonó la villa a gran velocidad; un chaleco con serigrafía que hace referencia a una conocida organización motera con la que se vincula al principal investigado y su escolta, según distintas versiones, Los “Ángeles del Infierno”; un arma de fuego, corta y automática, con el número de serie borrado; dos cargadores municionados, un silenciador y 1.635 euros en efectivo.

Finalmente, tras la consecución de múltiples gestiones de investigación la Policía logró identificar, localizar y detener, por supuestos delitos de encubrimiento y omisión del deber de socoro, a otras ocho personas asistentes a la fiesta. Entre ellas figuran un ciudadano alemán de 43 años y un iraquí de 34, amigos y acompañantes del autor material de los hechos, con los que compartía mesa en el evento. También, una dominicana de 53 años y un español de 35, organizadores del evento; tres españoles de 43, 44 y 47 años, que ejercían funciones de seguridad; y un español de 40 años, dj contratado junto a la víctima para la música del evento.
La autoridad judicial competente ha decretado el ingreso en prisión del autor material de los hechos y de la persona que le daba cobertura y protección. Asimismo, continúan las gestiones para proponer para sanción a todos los asistentes de la fiesta por quebranto de las medidas contra la Covid-19.
