En la Asociación de Comerciantes y Profesionales del Casco Antiguo llaman la atención sobre una dinámica que están apreciando en la zona, donde, según ha explicado su presidenta, Carola Herrero, en La Entrevista de marbellahoy.es, un buen número de locales que antes de la pandemia regentaban familias y particulares de la ciudad, que quedaron en una situación financiera complicada por la pandemia, y ahora, sus negocios están pasando a manos de inversores “de afuera”.
“Muchas familias de Marbella se han quedado en el camino, muchos locales eran de gente de aquí. Ahora vemos que está cambiando, muchos propietarios están endeudados y no saben cómo van a abrir. Lo que se está viendo es que muchos locales están pasado a franquicias o empresas de afuera. Tiene su parte buena porque los inversores quieren venir, pero los beneficios no se quedan aquí”, indica Herrero.
Entretanto, cuenta, las sensaciones son mucho mejores cara al verano. Lo más duro de la pandemia fue un tiempo de “incertidumbre por los cambios constantes y, en cuanto a la salud, la gente ha pasado mucho miedo”, señala la presidenta de ACOPROCAMAR, pero ahora, dice, “parece que se va clarificando mucho y se ve otro estado de ánimo, han empezado a abrir muchos comercios, está vacunada mucha gente, porque en torno a un 60 por ciento del Casco Antiguo son gente mayor, y ya parece que va mejorando la situación”.
Durante la entrevista, Carola reflexiona también sobre las carencias que el enclave sigue teniendo respecto al aparcamiento y cómo persisten las asignaturas pendientes de atraer más al público local.