El Ayuntamiento ha accedido a la petición de vecinos del entorno de El Capricho y está procediendo al cierre perimetral del parque que hay en la zona, para poder cortar su utilización por las noches, desde las doce de la noche, hasta las 11 de la mañana.
Según han informado, es un muro de forja, principalmente, con 350 metros de perímetro y 500 metros cuadrados de cerramiento. Ahora mismo, los operarios municipales están acometiendo labores de demolición y excavación ara sustentar la nueva estructura.
La presidenta de una de las comunidades de vecinos de la zona, Fátima Morito, ha explicado al respecto que llevaban “mucho tiempo”, pidiendo esta actuación. También ha celebrado que se trate de un tipo de vallado “como se hacen en los parques ingleses, que permiten la visibilidad desde la calle”.
Con esta medida esperan “evitar que se realicen concentraciones de personas que no nos dan mucha seguridad”, aunque señala que “también nos gustaría que se iluminaran más algunas zonas”.
En cualquier caso, Morito aclara que “no es una zona peligrosa, es muy tranquila, pero estos últimos años se han concentrado grupos de jóvenes y sobre todo en pandemia. Eso genera ruidos por las noches y que por las mañanas el parque no esté limpio”.
