Trabajadores municipales han protestado este viernes, durante el pleno extraordinario, contra el plan de ajuste que el equipo de Gobierno tendrá que llevar a cabo para que el Ayuntamiento pueda beneficiarse de un mecanismo del Gobierno central para abonar más de 40 millones de euros en sentencias judiciales.
Los empleados se han concentrado ante la puerta del salón de pleno y han silbado y coreado consignas contra los recortes cuyo impacto sobre los servicios municipales y la plantilla de trabajadores del Ayuntamiento aún no se han concretado. Las protestas se han escuchado a través de la propia retransmisión de la sesión plenaria.
«Solicitamos el plan de ajuste, donde hay medidas que involucran directamente al Capítulo 1 (de Personal) y que lo congelan durante diez años sin haberlo hablado y dándonos información dos días antes de que se aprobara. Todavía no nos han dado la documentación que nos han solicitado. Seguimos a la espera de nuevas noticas y saber qué van a hacer. Si quieren llegar a cualquier tipo de negociación se tienen que sentar y empezar de cero», ha señalado Antonio Millán, presidente de la Junta de Personal
Miembros de los órganos de representación de los trabajadores se concentran cada mañana desde principios de octubre ante la puerta del Ayuntamiento para protestar contra los recortes. Y Contemplan más movilizaciones después de que la plantilla municipal no se creea eso de que el plan de ajuste que debe emprender el Ayuntamiento durante los próximos 10 años no va a afectar al funcionamiento cotidiano de la Administración local, como sostiene el portavoz municipal, Félix Romero, versión oficialista expuesta en diferentes ocasiones, por ejemplo, en el pleno extraordinario donde fue aprobada la medida.
Más allá de lo que digan los políticos, la Junta de Personal y el Comité de Empresa, representación sindical de la plantilla, tienen claro que ese ajuste al que ha de someterse el Consistorio incide directamente en el capítulo 1, el que afecta a trabajadores y trabajadoras municipales, porque así viene reflejado en el documento.
Según Antonio Millán, “lo que existe en el compromiso del plan de ajuste es el pago de un millón 300.000 euros al año, con bajadas de sueldo o amortización de plazas”.
