El confinamiento, los cambios en las rutinas diarias, la transformación de la vida social por el aislamiento y distancia física, la pérdida de libertad, la preocupación por temas de salud y económicos, entre otros factores, han contribuido a un impacto perjudicial en la salud mental de toda la población, es por eso que en La Entrevista de marbellahoy.es charlamos con la Doctora en Psicología Clínica, Hortensia Cuadrado.
En la pandemia del covid-19, las condiciones sociales y de contexto de las personas han quedado muy afectadas y, por lo tanto, han repercutido en la salud mental. El confinamiento, las restricciones posteriores y la alteración de las costumbres y las rutinas diarias, han afectado gravemente a la actividad personal, laboral, educativa, social, económica y cultural, entre otras. «Ha sido un encierro, ha perjudicado muchisimo, sobretodo a la gente que no tenía herramientas para salir Psicológicamente del problema», señala la Doctora.
La Doctora Cuadrado tiene una idea innovadora y diferente para ayudar a sus pacientes:
«Ahora mismo tengo en mente dos proyectos, mi gabinete se vuelve a abrir para atender a toda la gente con unos precios simbólicos y por otro lado estoy pensando en hacer unos desayunos-charlas en una cafeteria, la idea sería dar una charla pero no una charla en el sentio que te sientes y estes dos horas escuchando a un señor que te está contando una historia, quiero que sea algo interactivo, quiero hablar por ejemplo de la depresión a la personas que a ese día le interese ir a esa charla con un desayuno y que puedan preguntar, serían consultas de Psicología pero digamos más en general, con varias personas, cada uno pude preguntar lo que quiera y tomarse un café frente al mar con gente que sabe que te va a comnprender»
Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), durante este primer año de pandemia, un 6,4% de la población ha acudido a un profesional de la salud mental por algún tipo de síntoma, el mayor porcentaje (un 43,7%) por ansiedad y un 35,5% por depresión. Por eso resulta clave el uso de herramientas que ayuden a combatir las secuelas psicológicas de la pandemia, en especial a los grupos de población más vulnerables, como los adolescentes, con menos experiencia y herramientas para enfrentarse a una experiencia tan traumática e inesperada como una pandemia.