Los vecinos de las urbanizaciones que colindan con la discoteca Opium, en la que un tiroteo a mediados de julio se saldó con cinco heridos y tres detenidos, han salido con pocas esperanzas de encontrar soluciones a las molestias que genera la actividad del establecimiento tras la reunión con integrantes del equipo de Gobierno.
Minutos después de las nueve de la mañana, el administrador de la comunidad de la zona residencial y una representación de los vecinos se han encontrado en el Ayuntamiento con los delegados municipales de Seguridad Ciudadana y de Industria, José Eduardo Díaz y Félix Romero, y el jefe de la Policía Loca, Javier Martín. El encuentro, en el que no ha habido técnicos municipales en contra de lo que anunció el Gobierno local, se ha prolongado hasta minutos después de las once de la mañana.
Los vecinos han expuesto las quejas sobre las molestias que genera la actividad de Opium, como la contaminación lumínica y acústica,
“Por parte de Industria no vemos mucho interés por arreglar el problema. Le ha echado la culpa a los funcionarios y a otras administraciones. Pero el responsable es el delegado de Industria, aunque echa balones fuera. Por lo tanto, no tenemos muchas esperanzas de que esto se vaya a solucionar”, ha señalado Santiago Montero, uno de los vecinos que ha estado en la reunión.
Una de las medidas que el Ayuntamiento ha propuesto a los vecinos ante los inconvenientes que produce la discoteca ha sido la vía judicial, según Montero. “Nos han dicho que, si no estamos de acuerdo con lo que se está haciendo, acudamos a los tribunales. En definitiva, no nos dan soluciones, aunque han reconocido que han llegado tarde a darnos el apoyo”, ha apuntado.
La reunión se produce después de que vecinos de la zona denunciaran en los últimos días que el Gobierno local rechazaba recibirlos para abordar las incomodidades que genera la discoteca y las actuaciones que ha seguido la Policía Local para evitarlas.
Los vecinos anunciaron que querían saber cuántas intervenciones, inspecciones y actas de infracción habían realizado los agentes de la Policía Local en el establecimiento, así como el resultado, han señalado los residentes, de cada una de las llamadas telefónicas al 092 y las denuncias realizadas sobre el ruido y las diferentes actividades que se desarrollan en el interior del recinto.
“Queremos saber qué inspecciones se han realizado tanto por Protección Civil como por Bomberos para comprobar los requisitos de seguridad exigible como auditorio; si se ha hecho antes de su apertura o no se ha hecho aún; o si en las inspecciones que se han realizado se comprueba que el limitador de sonido corresponde con el que se ha autorizado y si está funcionando. En los últimos años no ha funcionado o no ha transmitido lecturas, y ahí se puede comprobar tanto el horario de utilización como el ruido que emite al aire”, indicaron los vecinos a través de un comunicado de prensa.
Los residentes lamentaron que el delegado de Seguridad Ciudadana no les quisiera atender porque “no tenemos la suficiente entidad para ser atendido por él y nos trata como a unos mindundis”. “Los vecinos pensamos que como representante del pueblo que es tiene la obligación de reunirse con nosotros y no escabullir el bulto”, agregaron.
Preguntado al respecto, el Ayuntamiento ha declinado ofrecer su versión sobre la reunión con los vecinos.