‘El Conde Rudi. Un hombre afortunado’ es el resultado de horas de conversaciones durante seis meses entre el propio Conde y el editor de Edinexus y escritor, José María Sánchez-Robles.
Con motivo de su 90 cumpleaños, los hijos Sophie y Friedrich regalaron a Rudi una recopilación de testimonios personales que, de la mano Sánchez-Robles, ha trascendido del ámbito familiar para convertirse en memoria viva de uno de los personajes sin los que no se entendería la Marbella de hoy ni la transformación turística del propio municipio.
El Conde Rudi llegó a Marbella un día de finales de diciembre de 1956, con 24 años y recién acabados sus estudios de hostelería en la ciudad suiza de Lausanne.
Alfonso de Hohenlohe había confiado en él, a pesar de su juventud, para que reinventara aquel hotel de carretera ubicado en las afueras de un pueblo de 10.000 habitantes que había entrado en funcionamiento en la Semana Santa de 1954. Bajo la dirección de Rudi, el hotel Marbella Club se transformó en el establecimiento que hoy conocemos en una Marbella que se experimentó sus años dorados en el sector del turismo.
“Rudi llegó a Marbella en la década de los 50 y desde entonces no se ha movido de aquí. Es un personaje clave para conocer la Marbella actual. Desarrolla su actividad en un hotel significativo de la ciudad”, señala Sánchez-Robles.
