La Junta de Andalucía confía en que las actuaciones para mejorar un tramo de dos kilómetros de longitud de la carretera entre Marbella e Istán, la A-7176, estén finalizadas en un año.
Las actuaciones cuentan con un presupuesto de unos cinco millones de euros, de los que el 40 por ciento los aportará el Ayuntamiento, a pesar de que se trata de una infraestructura que compete al Gobierno autonómico. El acuerdo de los pagos se remonta a un protocolo de actuaciones que ambas administraciones firmaron en 2019, como ha recordado este viernes el viceconsejero de Fomento de la Junta de Andalucía, Mario Muñoz-Atanet.
“Este viernes estamos celebrando que la obra ya es una realidad. Entendimos que este tramo de carretera es absolutamente ya urbano, pero en el que se producen desplazamientos de peatones sin aceras y de ciclistas sin una sección viaria suficiente para que circulen con seguridad porque no hay iluminación”, ha señalado.
Primero se acordó un protocolo entre la Consejería de Fomento y el Ayuntamiento de Marbella para abordar de manera conjunta los problemas de seguridad vial detectados en la A-7176 en el tramo desde la intersección a la antigua carretera nacional N-340 hasta el cruce con la autovía del Mediterráneo (A-7). Posteriormente, se redactó un proyecto constructivo que se presentó a finales de julio del año pasado junto a la firma del convenio entre las dos administraciones, que dio garantías a la financiación de la obra.
La obra contempla arcenes de 1,5 metros de anchura, la rectificación de su perfil longitudinal y la construcción de cuatro glorietas que regulen la circulación, reduzcan la velocidad y mejoren la seguridad vial en los cruces existentes. Asimismo, se construirán acerados perimetrales en ambos márgenes de 2,5 metros de anchura.
También se ejecutarán obras de drenaje transversal para la mejora del funcionamiento hidráulico, con la ampliación mediante marcos prefabricados de la obra de fábrica existente en el Arroyo del Tejar y en la sustitución de dos obras de fábrica de dos escorrentías naturales.
Esta obra se completará con la instalación de 200 luminarias en el alumbrado público, energía eléctrica subterránea bajo el acerado y una red de riego y jardinería. También se incorporará arbolado con la plantación de 213 palmeras a lo largo del recorrido, además de nueva señalización horizontal y vertical, dispositivos de balizamiento y medidas de protección.
Los trabajos resolverán los problemas de seguridad vial que sufre la carretera por su estrechez, ya que cuenta con un ancho de calzada inferior a los seis metros sin arcenes, lo que dificulta la convivencia entre coches y ciclistas, sobre todo en un tramo que está plenamente integrado en la ciudad. La Junta calcula que unos 2.000 vehículos transitan cada día por esta vía, de los que un 11 por ciento son tráfico pesado.
