La Carrera de las Aguas de Istán cumplió este domingo 18 ediciones, asentada como una prueba referente en el calendario atlético de la zona, en buena medida, por la singularidad del recorrido, no muy extenso, apenas 6 kilómetros, pero que discurre tanto por los parajes naturales que rodean al pueblo, como por las serpenteantes calles y plazas del casco urbano, atravesando, incluso, tramos de escaleras y más allá de cualquier disciplina de atletismo convencional.
El encanto de la competición, en cuya organización colaboran conjuntamente el Ayuntamiento de la localidad y el Club Atletismo San Pedro, así como el entorno, atraen a gran número de participantes, en algunos casos, representantes de los clubes atléticos más significativos de la provincia, hasta alcanzar los 400 inscritos.
Además del recorrido principal, sobre un circuito al que los participantes hubieron de dar dos vueltas, la prueba contempla todas las categorías, desde prebenjamín a senior, incluso para los más pequeños. De hecho, en la presente edición, como novedad, incluyeron el apartado “baby”, para niños y niñas de apenas 3 o 4 años, aunque con una distancia reducida.
