El bosque de las palabras
Conocí a Antonio García Velasco en un encuentro del entonces grupo Azahar Poético en Álora en el verano del 2018. Aquella tarde fui invitado a leer mis poemas sintiéndome muy arropado por grandes amigos y poetas y por José María Lopera y Antonio García Velasco. Luego coincidimos en otros actos culturales en Málaga y siempre me impresionó de él su templanza, esa que ilumina a los grandes hombres y que da corporeidad a los filósofos, porque Antonio García Velasco, era profesor, poeta, lingüista, informático… en realidad un humanista pero en su obra, en toda su obra hay un deje filosófico que ilumina los caminos de los lectores.
Pero a primeros de este año la parca nos lo arrebató y sus amigos de la Asociación de Profesores Jubilados de la Universidad de Málaga le propusieron un homenaje que se llevó a cabo en el rectorado de la Universidad la misma tarde en la que el verano de este determinante año, para la familia de Antonio, asomaba por la puerta.
Abrió el acto el presidente de ASPROJUMA: Antonio Porras Cabrera, que emocionado compartió con los asistentes al homenaje vivencias del compañero y del amigo.
Lourdes Martínez Reina que actuaba como secretaria sustituyendo al fallecido que lo fue hasta su muerte, habló con sentidas palabras del compromiso de García Velasco con la asociación y con el aula de poesía, agradeciendo todo su trabajo y empeño.
Seguidamente José Olivero Palomeque vocal representante de los miembros cooperantes se esmeró en la semblanza del amigo, del poeta, del intelectual.
Habló de su inclinación a las matemáticas, de su vinculación con la informática publicando varias obras, de sus dotes para las lenguas clásicas. De los institutos de bachillerato en los que trabajó, de sus colaboraciones periodísticas. De su compromiso con la cultura malagueña desde aquella BANDA DE MAR donde estuvieron entre otros afamados nombres: Jorge Guillén y Manuel Alcántara. Del Grupo Málaga… en fin, de sus publicaciones que como erudito de las varias disciplinas que cultivó le llevaron a editar 17 poemarios, 9 novelas, algunos cuentos, 5 publicaciones informáticas y 19 ensayos literarios. Pero sobre toda su humanidad la que demostró a su familia pues fue un hombre familiar, amante de los suyos y amado por los suyos.
En el acto tuvieron voz muchos de sus amigos y amigas que contando sus vivencias junto a Antonio, o recitando poemas dedicados a él o escritos por él, pusieron una nota de sentimiento que a todos los asistentes nos embargó, como lo hizo Juan Crisóstomo García, rapsoda que interpretó pasajes de La Vida es Sueño de Pedro Calderón de la Barca.
También su familia al finalizar el acto agradeció el recuerdo y el homenaje al esposo y al padre. Vean a su hijo Pablo:
Un emotivo homenaje, un especial encuentro de todos los que de una forma u otra vivimos y supimos de una gran persona, de un excepcional intelectual malagueño: Antonio García Velasco.
Para finalizar nuestro Bosque de las palabras de hoy les dejo con la música de Enrique Hurraco interpretando al chelo: El Cisne de Saint – Saëns.
Gracias