El bosque de las palabras

Paco Jurado es un anciano ilustre.
Es impetuoso, arrollador… Fue sindicalista, aunque supongo que nunca dejará de serlo, porque eso es algo que se lleva en la sangre… para siempre.
Es un artista multidisciplinar… hace cartelería, pintura, de la que se dice que la melancolía inunda su obra.
Realiza escultura del metal como evolución de su oficio originario de chapista forjador, hasta llegar a investigador de la ductilidad y maleabilidad de los metales.
Vinculado desde siempre a APLAMA, la Asociación de Artistas Plásticos de Málaga.
Ha transitado por etapas figurativas y abstractas. Ha pasado por diferentes estilos:
Expresionista, impresionista, cubista,
puntillista.
Los críticos de arte caracterizan su obra escultórica por la reducción de líneas, geometrías cubistas, constructivistas, de temáticas sociales o políticas, huyendo de la perfección, de lo pulcro.
Paco Jurado es caótico. Agnóstico pero esotérico. Solidario
Controvertido, por lo impactante de algunas de sus obras, en una sociedad anestesiada.
Vivió y participó en un ambiente artístico importante:
Jorge Lindell, Elena Laveron, Eugenio Chicano, Enrique Brinkman, etc.
Entre sus temáticas se cuentan los retratos de mujer, el mar, bodegones, temas sociales, temas religiosos. Personajes populares.
Entre sus referentes están: Emiliano Barral, Julio González, Pablo Gargayo, Henry Moore, Alberto Giacometti. Pablo Ruiz Picasso.
Firma sus obras, muy particularmente, con su versión de la paloma de la Paz de Picasso.
Con gran orgullo se proclama amigo de Pepa Flores, nuestra Marisol de siempre.
Paco Jurado, es un referente escultor de Málaga.



