El bosque de las palabras

Carlos Benítez Villodres fue un poeta malagueño cuya obra conocí a través de su hija Lola Benítez con la que he recitado en varias ocasiones y en especial en el Café Azul, un rincón exquisito de Fuengirola cuya existencia ahora desconozco.
El poemario que les propongo hoy lo escribió este buen poeta y lo editó Granada Club Selección en el año 2011.
Lo que me ha impulsado a dárselo a conocer es que Carlos Benítez lo compuso en Décimas, también conocidas como Espinelas.
Así las define el propio autor usando precisamente esta estrofa:
Décima o espinela (I)
Un ramillete de ideas
compartidas en diez versos
octosílabos, tan tersos
como sueños de mareas.
Con algunos lisonjeas,
con otros, los más, atacas
a serpientes y cloacas
nauseabundas, sin conciencia,
que emplean su prepotencia
con cizañas o albahacas.
Décima o espinela (II)
Llevo en mi alma esos racimos
de versos siempre fecundos,
donde palpitan mis mundos
limpios de herrumbre y limos.
En ellos no habitan mimos
ni paraísos pedantes,
sino luz de caminantes
que me alumbra las estelas
para crear espinelas
“con las glorias de Cervantes”
Pues Cervantes la usó, como Lope de Vega, Calderón de la Barca y Góngora. Arraigó más en hispano América que en España donde fueron llevadas por los canarios, siendo en Canarias de usual utilización más que en otros lugares del territorio español.
La Décima es una estrofa de diez versos octosílabos creada por el músico y poeta rondeño Vicente Espinel en el año 1591. Sus rimas son consonantes y los versos se organizan de la siguiente manera: abba accddc. Letras minúsculas pues son versos de arte menor, si fueran versos de arte mayor las letras se utilizarían en mayúscula.
Cuando hablamos de organizar los versos nos referimos a cómo riman, en este ejemplo, para que lo entiendan mejor, serían: primero con cuarto y quinto. Segundo con tercero. Sexto con séptimo y décimo, y octavo con noveno.
Por su ritmo y musicalidad es apropiada para ser cantada, por eso se imbricó con fuerza en el pueblo cubano, con quién Carlos Benítez tuvo tanta conexión. Autores conocidos que la utilizan o utilizaron, Violeta Parra, El Kanka, Jorge Drexler, Rozalén, etc.
Así ve la envidia el autor.
Mal del hombre.
De la envidia, mal del hombre,
solo surgen falsedades,
bocanadas de maldades
con apellidos y nombre.
No hay viajero que se asombre
de esas dagas y despojos
que matan ante los ojos
de un caminante cualquiera
al ruiseñor y a la fiera
con sus hirientes antojos.
Perfecta, dispuesta para ser cantada y acompañada con, preferentemente, instrumentos de cuerda.
La Décima admite cualquier temática pero la más utilizada es la sátira que le da un ritmo esencial. Con este ejemplo se convencerán:
Nicolás Sarkozy (I)
Sarkozy, con arrogancia,
a España la ningunea
ante cualquier asamblea
prostituida y sin sustancia.
Este enano de voz rancia,
que a todas partes galopa,
se cree el amo de Europa,
pero solo es un bellaco
de la estirpe del macaco
que ni a su país arropa.
POR LOS DERROTEROS DE LA LUZ
Poemario de Carlos Benítez Villodres
Editorial Granada Club Selección, 2011.
Que lo disfruten.