El bosque de las palabras

Tengo en mis manos un libro explicativo e ilustrativo del título de nuestro Bosque de las Palabras de hoy. “El arte no entiende de fronteras. Nuestro idioma común, el color”.
El viernes 13 de mayo tuve el placer de asistir a la inauguración de una exposición de pinturas en la iglesia de la Encarnación de Álora que me dio la dimensión de cómo está el colectivo pictórico mundial.
Veintisiete artistas colgaron sus obras en esta espectacular iglesia aloreña bajo el denominador común de una misma temática. Pero la dificultad añadida a estas obras fue que todas se realizaron en una tela mexicana que llaman de Ayate y que hay que saber tratarla para poder fijar en ella el color.
El Ayate es una tela que se saca del maguey o pita que se suele usar para hacer bolsas y los panaderos mexicanos para cerner la harina y quitarle posibles asperezas.
La colorida exposición une a España y a México y se hace con la intención de homenajear a la Fe de los católicos y al Arte con mayúsculas pues el motivo ha sido el de retratar a la virgen mexicana de Guadalupe en el 490 aniversario de su advocación.
La Fundación Amapola, creada por Jesús Matamala, pintor, y el poeta José María Lopera, recientemente fallecido, junto a miembros del Taller y Galería River Arte, palacio del arte de México, han tenido a bien llevar a cabo esta muestra pictórica que recomiendo por la singularidad que entraña y por la brillantez de las obras expuestas.
La editorial Granada Club Selección, Granada Costa, ha publicado un libro que deja constancia de este especial evento pictórico y que aplaude la iniciática como hermandad entre dos pueblos hermanos que ahora unen a sus sentimientos el color en torno a una de las vírgenes más adoradas del mundo entero.
